No más gigantes de cemento en Villa Pueyrredón
El parlamento porteño aprobó el proyecto de rezonificación surgido a partir de la lucha vecinal. Los nuevos edificios no podrán superar los 12 metros de altura.
salvemos al barrio
En la última sesión ordinaria de la Legislatura porteña se aprobó, en segunda lectura, el cambio de distrito de zonificación actualmente vigente: “Residencial General de Densidad Alta por el Residencial General de Densidad Media-Baja”, para un sector del barrio de Villa Pueyrredón comprendido por las calles Gavilán, Mosconi, Condarco, Griveo, Av. San Martín, Carlos Antonio López, Llavallol, Mosconi, Campana y Vallejos. Otro proyecto de ley similar, incluye al barrio de Barracas.
La necesidad de contar con esta nueva normativa para Villa Pueyrredón y Agronomía, busca «consolidar y revalorizar lo existente, y propiciar aquellos nuevos emprendimientos que se adecuen al carácter de este ámbito». “La zona padece una densificación intensiva de las parcelas, que propone el reemplazo de edificios de una y dos plantas por otros de más de diez pisos. Esto no guarda correlato alguno con los números arrojados por los censos de población y produciría la concentración del crecimiento solo en algunos lotes, fragmentando el tejido y destruyendo las cualidades urbanas ambientales del barrio. Los primeros edificios de vivienda multifamiliar en alturas terminados en los últimos años irrumpen en el tejido urbano, indicando que allí se encuentran barrios de casa bajas».
Hace pocos meses, desde la agrupación Salvemos al Barrio se había denunciado que el lobby inmobiliario de Villa Pueyrredón prentendía voltear un proyecto de ley aprobado en primera lectura por la Legislatura porteña. «Primero fue contra la ley 3447 para la traza de Salvador María del Carril, límite de Agronomía y Villa Pueyrredón, y también contra la ley 2767 -proyecto del legislador Alvaro González (PRO)-, que necesitaba de su aprobación en segunda lectura para preservar la identidad barrial y el perfil paisajístico.»
Finalmente, la resistencia vecinal impidió la maniobra de las constructoras y hoy festeja la aprobación de esta ley, necesaria para preservar de la construcción indiscriminada de moles de cemento, aquellas zonas que aún no fueron intervenidas; cuyo destino final era cambiar para siempre sus fisonomías, colapsando además los servicios básicos y la convivencia diaria.
La Ley sancionada, se suma a la lograda sobre la Avenida Salvador María del Carril, que le impone este requisito a las construcciones sobre esta arteria y a las homologadas con el mismo tenor para los barrios de Coghlan, Colegiales, Palermo y Caballito.
Para conocer los antecedentes de la lucha vecinal:
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