Guerra de Malvinas 40 años: En el Club SABER se formó una comisión de apoyo solidario a los soldados
Marga Zalazar y Roberto Vespa, dos históricxs militantxs del Movimiento Cooperativo de nuestro barrio, recordaron aquella reunión.
Por Fernando Belvedere
El 19 de agosto de 2020, conversamos, a través de la Radio El Laberinto con Marga Zalazar y Roberto Vespa, histórixs vecinxs de Parque Chas y militantes del movimiento cooperativo con una larga trayectoria en la zona en la filial 060 del Banco Credicoop de la Avenida Triunvirato y Berna. A través de sus testimonios, hicimos un recorrido por sus vidas en la niñez y juventud y por varias gestas y acciones que se produjeron en nuestro barrio, desde su labor como dirigentxs cooperativistas.
Marga y Roberto recordaron durante la entrevista ese mes de abril de 1982: “¡Era una dicotomía!, porque nadie quería una guerra y ¡menos el movimiento cooperativo! Pero ya estábamos en guerra. Los conscriptos ya estaban en las Malvinas. Y acá se forma la Comisión en Solidaridad con los soldados en las Malvinas, que Fanti, un viejo dirigente del barrio, militante, del (club) Saber, fue uno de los que más lo impulsó junto con Blanca, otra compañera entrañable, fundadora del Centro de Jubilados 14 de abril.
El objetivo de aquella comisión era dar apoyo a nuestros soldados, mientras seguíamos debatiendo entre nosotros la locura de la guerra. Parecía que había una contradicción. Algunos no nos entendían. No, no, los conscriptos, con 18 años estaban, quieras o no, estaban en las islas Malvinas y de alguna manera había que colaborar con ellos.
—¿Acá cerquita, en la plaza Éxodo Jujeño se le puso Puerto Argentino a la calle Liverpool?
Roberto Vespa (RV): —Claro, y Crucero Belgrano era Londres.
—Crucero Belgrano era Londres y a la calle Liverpool se la bautizó como Puerto Argentino. ¿Esa fue parte de la movida?
RV: —Así es. Y eso, lo interesante, más que nada la calle Londres (rebautizada “Crucero Belgrano”) se mantuvo durante muchos años con ese nombre.
—Habrá que ver si no se podrá alguna vez hacer alguna acción para recuperar Puerto Argentino. Sería lindo tener una calle en el barrio que se llame Puerto Argentino o Crucero General Belgrano.
Marga Zalazar (MZ): —Ya lo creo…
MZ: —Porque fue algo muy importante en ese momento, todas las compañeras que íbamos al querido Club Saber, formamos una Comisión en apoyo a los compañeros que estaban en el frente. Y se hizo tan importante, que fuimos a parar al (Hospital) Tornú y nos recibió el director, ahora no recuerdo el nombre, y ahí tuvimos… nos dio clases de primeros auxilios, nos hizo ver qué es lo que estaba pasando en el país. Y después por Blanca, que era la esposa de Fanti, Blanca Gaudio, que fue el alma de Llerena, muchos compañeros seguramente se acordarán de ella, nos fuimos a ver a las 5 de la mañana a Palermo a un coronel, que había conseguido el nombre, para que nos dejaran visitar a los que venían de la rendición, que nos dejaran visitar a todos los soldados que venían. Y así fuimos varias veces a hablar con este coronel que nos facilitó la posibilidad de ir dos veces o tres veces por semana al Hospital Militar para estar con los excombatientes. Lamentablemente, no quiero recordar cómo estaban esos chicos… pero era algo… bueno, lo que queda de la guerra. Estuvimos más de una semana, que ni nos miraban. Hasta que después, como vieron que nosotros estábamos ahí para tratar de hacerles compañía, que eran solitos, la mayoría tenía 20 años, eran de Chaco y Corrientes, y no sabían leer ni escribir. Y así, de a poquito, nos fueron pidiendo que le escribiéramos las cartas sus familias. Le brindamos todo lo que estaba a nuestro alcance, de nuestra situación como madres ya en ese momento, de ver esos chicos tan jóvenes que fueron realmente a la muerte. El estado de ellos era terrible. Y con ellos hicimos las compañeras del barrio, una ayuda espiritual, digamos, de contención para estos jóvenes que no tenían familia. Y bueno, hicimos también una experiencia muy grande y todo esto fue a partir del Club Saber.