EXTENSIÓN DE LA LÍNEA
B DE SUBTES
Las dos nuevas estaciones se inaugurarían
en 2010
Mientras las obras civiles de la Etapa II de las obras de extensión
llegan a su fin, se acerca el proceso licitatorio para la gran cochera
de Urquiza.
Cinco años pasaron desde la inauguración de las estaciones
Tronador y Los Incas, las dos primeras del plan de extensión
de la línea B hasta el barrio de Villa Urquiza. Desde 2001
se encuentran en construcción las estaciones Echeverría
y Villa Urquiza, pero distintos inconvenientes en las obras prorrogaron
las fechas de apertura.
La estación Echeverría, ubicada en Av. Triunvirato
y Juramento, se caracterizó por una construcción
literalmente inmersa en el agua. La cercanía de las napas
freáticas obligó a deprimir las mismas para proceder
con la obra. También sufrió el fallecimiento de
un obrero en plena jornada laboral en las cercanías a la
estación.
Villa Urquiza -próxima a denominarse Juan Manuel de Rosas
por la Legislatura porteña- sufrió un derrumbe de
hormigón por la ruptura de un molde.
Los trabajos también fueron afectados por el recorte presupuestario
del año pasado cuando la administración de Jorge
Telerman se vio obligada a reducir en gastos producto del defasaje
económico que vivió la ciudad a fines del 2007.
Así todo, el fin de la obra civil se está acercando
en la Etapa II de la extensión. En menos de 2 meses se
retirarán las grandes armaduras metálicas que realizan
el hormigonado de los túneles para dar paso a la fase arquitectónica
de la obra.
Mientras tanto, se acerca al proceso licitatorio la obra que
caracterizará a la línea B: la cochera y cola de
maniobras Urquiza. Será un túnel de 800 metros de
doble vía posterior a la última estación,
y llegará casi al Parque Sarmiento.
Estará equipado con maquinaria para tareas de mantenimiento
de día, y será utilizado principalmente para el
guardado del material rodante ya que el actual Taller Rancagua
se encuentra saturado. Además, la apertura de Tronador
y Los Incas complicó aún más el procedimiento
de estacionamiento de trenes.
La actual obra de extensión con sus dos estaciones es
encarada por la empresa Benito Roggio e Hijos S.A., pero la cola
de maniobras, al ser una obra totalmente distinta, requerirá
de un llamado a licitación adicional.
Es por ello que Benito Roggio se encuentra, junto a su cuerpo
técnico, en plena evaluación para calcular los costos
que les demandará la obra, para presentarse en el llamado
a licitación que realiza Subterráneos de Buenos
Aires S.E., quien diseña, monitorea y paga las obras del
subte porteño.
Las 6 formaciones de coches usados españoles CAF aún
no llegaron a la Argentina, pero su envío es inminente.
Servirán para reforzar la flota de 21 trenes de la línea
B para la apertura de las nuevas estaciones en el barrio de Villa
Urquiza, apertura pronosticada para el año 2010.
Desde la ampliación de su traza hasta Los Incas de 2003
la línea B tiene un déficit de material rodante
para cubrir su frecuencia. La gravedad de la situación
es aún mayor si se tiene en cuenta que la línea
roja llegará en breve hasta la estación Villa Urquiza,
en proceso de convertirse en General Rosas, sumando así
casi 2 kilómetros de túnel. El trasbordo con el
Ferrocarril Mitre en el barrio de Villa Urquiza sumará
un importante caudal de pasajeros a la línea, la que más
pasajeros transporta y usualmente colapsada en horas pico.
El problema se origina en parte en que los coches Mitsubishi
de la línea Marunouchi que cubren el servicio fueron comprados
en un número que no previó futuras expansiones.
Las actuales 21 formaciones de trenes japoneses no dan abasto
y se necesitan, según la Secretaría de Transporte
de la Nación, seis formaciones completas más para
poder mantener la escasa frecuencia de unos 3:30 minutos entre
las 8:30 y las 10:00 y las 17:30 y las 19:00.
fuente: enelSubte.com