NOTA DE OPINIÓN
Sobre el futuro del periodismo vecinal en
la era tecnológica
Por Jorge Rovner, Socio fundador de la Cooperativa EBC
El periodismo vecinal como un medio de expresión de las actividades
del quehacer social se encuentra condicionado por las reglas de
la sociedad, también por los adelantos o retrocesos de la
misma.
Desde su sanción en el año 2003 y con la reglamentación
de la ordenanza que los rige hubo, sin embargo, una discusión
que no se dio, váyase a saber los motivos, que a nuestro
juicio resulta vital y prioritaria: ¿Qué es el periodismo
vecinal?
Una discusión que debe darse con la mayor amplitud y no
con la intención de imponer ideas sobre el resto, sino
con la humildad tomando conciencia que la pólvora ya fue
inventada y que algunos conceptos pueden servir para ampliar nuestra
visión enriqueciendo nuestro trabajo que debe insertarse
en los barrios obteniendo, de esta forma, una mayor representatividad
vecinal.
Porque sin inserción y sin representatividad barrial,
el periodismo vecinal quedará envuelto en una indefinición
que, al ponerse en práctica las comunas, se irá
agravando quitándole contenido y eficacia.
La discusión debe darse: debemos tener la humildad de
escuchar a otro colega, aprendiendo de sus experiencias evitando
toda forma de vedetismos o amiguismos que no sirven de nada.
En otro orden de cosas, la prensa vecinal no puede escapar a
una nueva realidad cada vez más evidente e indiscutible.
La llegada de las nuevas tecnologías, el surgimiento de
los blogs con sus propios adelantos como por ejemplo los video-blogs,
abren un panorama del que la prensa vecinal no puede desconocer.
La televisión digital, incluso, impone nuevas exigencias
a la prensa vecinal que no debe quedarse atada a una antinomia
entre los medios gráficos y el digital.
Si se estima, para nosotros con inusual certeza, que desde la
pantalla de una computadora se puede saber qué pasa alrededor
nuestro, esa discusión o antinomia pierden en forma absoluta
su razón de existir.
Por otro lado, los medios gráficos, aún con una
tirada de 10.000 ejemplares mensuales –que nadie hace para
ser sinceros debido a los altos costos que eso implicaría,
sólo pueden abarcar un sector del barrio y no el conjunto.
Con el devenir de los próximos cinco años y mediante
el reconocimiento de los vecinos, el periodista barrial podrá
superarse en beneficio del conjunto, no quedando atado a los costos
y al ya histórico drama que es la imposibilidad de conseguir
algún tipo de financiación que nos es negada y a
veces, con razón.
Desde el año 2003 el Gobierno de la Ciudad ha cumplido
lo que debería haber hecho mucho antes y que la ceguera
e ineptitud de algún intendente sobre el quehacer barrial
cajoneó por largos años. Recién con la llegada
del Dr. Aníbal Ibarra y siendo el Lic. Daniel Rosso, subsecretario
de Comunicación Social la vieja deuda fue saldada.
Hacia finales del año 2007, la Legislatura porteña
aprueba una nueva ley a propuesta de los Legisladores Elvio Vitali
(Frente para la Victoria) Facundo Di Fillipo (ARI) y Rodrigo Herrera
Bravo (Compromiso para el cambio) y promulgada por el Ingeniero
Mauricio Macri, actual Jefe de Gobierno porteño.
Ahora la responsabilidad es nuestra que debemos para el bien
del sector, debatir qué eso del periodismo vecinal.Alguna
vez, estamos convencidos, el debate deberá darse, que va
más allá del mejoramiento de una pauta publicitaria
y que permitirá diferenciarse, definitivamente, de las
agendas comerciales que carecen de contenido.