Este es mi sentimiento por Parque Chas, donde nunca me perdí, y donde me cansé de jugar en sus plazas con esos amigos que se quedan para siempre en el alma. Ahora vivo en la fría España, lejos de todo lo que alguna vez no supe valorar, cerca de crecimientos laborales y económicos que puestos en la balanza, pierden con el tiempo su peso.

Tengo 24 años y mucho miedo de volver. Crecí y maduré, y junto con la madurez viene colada la responsabilidad, aunque nadie la invite. Pero encontrar en el Google a www.parquechasweb.com.ar, me da lo que andaba buscando hace tanto tiempo: Un verdadero Hogar.

Deje de sentirme tan sola, empecé a pensar con alegría en el momento de la vuelta a Parque Chas. Me esperan, yo espero poder animarme a hacer lo que de verdad siento. ¿Volver con la frente marchita? Quizás, pero lo prefiero a que se marchite el corazón. Bueno, los dejo; trabajo en una inmobiliaria y hay que conformar al jefe gallego y atender necesidades de gente que piensa que nos hace un favor a los Argentinos... ¿Hace falta que diga algo más? Vomité mis sentimientos, espero que les haya gustado mi relato.