El Ministerio de Cultura porteño, presentó la versión multimedia del primer relevamiento que se hizo de la Ciudad en 1860, conocido como Catastro Beare.
Dicho material estará a disposición del público en general, está incluída toda la información en formato digital con la particularidad de que puede observarse todos y cada uno de los planos con sus respectivas referencias, detalles y ampliaciones.

El Catastro Beare está compuesto de 14 tomos originales que contienen en cada página una lámina pintada en acuarela con la vista aérea de cada manzana de Buenos Aires, con las parcelas de terreno marcadas, el perfil de las casas y el nombre de las familias que entonces las ocupaban.

Este valioso tesoro patrimonial se expondrá en la sede del Museo de la Ciudad, Alsina 412. La preservación digital del Catastro Beare ha sido una tarea que ha marcado un punto de inflexión en la metodología de procesamiento digital de acervos patrimoniales. Para cumplir el objetivo de capturar el contenido semántico de este valioso acervo, el equipo de especialistas se ha enfrentado a diversas complejidades que han sido un enriquecedor desafio profesional.

Durante la presentación, la Ministro de Cultura Sivia Fajre, expresó que "El Catastro Beare es una fuente única de relevamiento de la Ciudad, y es por eso que su difusión masiva, a través del proceso de digitalización, es un aporte invalorable en la difusión de nuestro patrimonio, ayudándonos a conocer la evolución poblacional de nuestra ciduad, y a reconocernos como parte de un proyecto urbano que involucra a las generaciones que nos precedieron.

Este es un camino en el que debemos profundizar: es poner a la tecnología al servicio de nuestros bienes patrimoniales. Había que encontrar un camino para responder a la demanda de los investigadores y del público ávido de
información: cuanto más fácil y accesible sea la consulta, el bien patrimonial cumple con su cometido".

Por su parte, la arquitecta Nani Arias, subsecretaria de Patrimonio Cultural, agregó que "No sólo podemos ver a la Ciudad en un período histórico dado (1860/1870) sino que esta digitalización permite la difusión de un material preservando al valioso original, que puede restaurarse y preservarse sin privar a los vecinos y los investigadores de la consulta".

Este material se podrá consultar en la biblioteca del Museo de la Ciudad, ahora visible y disponible a todo el que se interese en conocer un proceso de desarrollo urbano que permite ver una impronta romántica que le atribuyó a la ciudad su autor, el ingeniero Peter Beare.

En base al material digitalizado y teniendo como premisa el libre acceso a la información contenida en el Catastro Beare sin necesidad de la manipulación física del mismo para su mejor conservación, se ha diseñado una multimedia que permite navegar las distintas páginas de los 14 tomos que integran el catastro.