“La designación de María Fernanda Silva es un motivo de orgullo y celebración para el activismo negro argentino”
La diplomática de carrera con 30 años de trayectoria, fue propuesta por el Gobierno Nacional como nueva embajadora argentina ante el Vaticano. Será la primera mujer y afrodescendiente en ocupar este cargo. ParqueChasWeb conversó con el activista negro Federico Pita para conocer su opinión sobre este nombramiento.
Por Fernando Belvedere
La semana pasada se conoció la noticia de la designación de la diplomática de carrera María Fernanda Silva, al frente de la embajada argentina ante el Vaticano. La futura emisaria desciende de la diáspora caboverdeana y tiene una trayectoria de más de 30 años de servicios exteriores de la Nación: Acompañó a Alicia Castro cuando esta dirigente política estuvo al frente de la embajada en Venezuela, y fue ministra de la embajada en Ecuador. Allí también cumplió funciones ante la secretaría de UNASUR.
Para hablar de esta designación, ParqueChasWeb conversó con un referente del activismo negro en nuestro país. El es Federico Pita, afroargentino, politólogo, que dirige el Espacio Malcolm ubicado en Villa Crespo de nuestra Comuna 15, publica el periódico El Afroargentino y es fundador y director de DIAFAR , Diáspora Africana de la Argentina.
La diáspora africana constituye la población dispersa de origen africano que por distintos motivos se encuentra hoy fuera del continente africano pero mantiene un vínculo con las identidades africanas. En muchos casos, el motivo del desplazamiento de esta población fue forzoso y contribuyó decisivamente a la formación de las sociedades donde fueron llevados. En la región del cono sur de América Latina se ha consensuado utilizar la palabra afrodescendientes para definir a esta población, palabra que reviste un status legal ante organismos nacionales e internacionales.
DIAFAR se compone de un conjunto de personas que incluye a los afrodescendientes nacidos en Argentina, a los afroamericanos y a los inmigrantes africanos que son conscientes de ello y reivindican activamente un vínculo con África estando en Argentina, independientemente del Estado nacional en donde hayan nacido. Es un Colectivo abierto organizado legalmente en torno a una asociación cívica compuesta por la diáspora africana y personas comprometidas en una mejor comprensión del legado y la presencia africana en el particular contexto de la Argentina. La organización se define como un grupo inclusivo, no partidario, no religioso y en contra de todo tipo de discriminación o prejuicio.
Entrevista:
-Federico, para los que no estén al tanto de la causa del Colectivo de la Diáspora africana en Argentina. ¿Por qué es trascendente la propuesta de María Fernanda Silva como embajadora de nuestro país ante el Vaticano?
-María Fernanda es una diplomática de carrera con más de 30 años de servicios exteriores de la Nación, segunda en su promoción, una mujer muy destacada en su labor profesional, pero fundamentalmente vinculada a la comunidad. Lo interesante de su vinculación con la agenda negra y el colectivo afroargentino, es su visión de la realidad de nuestro país. En esa perspectiva, su nombramiento significa un motivo de orgullo y celebración para el activismo negro argentino. Hay mucho para trabajar en relación al rescate de la memoria y la deconstrucción del racismo institucional en nuestro país. Este nombramiento implica un paso adelante en esta lucha.
-Mencionás un ascenso político de Silva. ¿Cómo o cuál ha sido su trayectoria profesional en el servicio exterior durante 30 años?
-María Fernanda Silva estuvo en el Vaticano, en la Unasur, estuvo en Venezuela, por lo tanto sus credenciales profesionales son intachables e indiscutidas. Ahora por su filiación política, por su militancia antiracista conectada con la agenda afroargentina, durante el gobierno de Cambiemos fue una perseguida política, intentaron desplazarla del Servicio Exterior de la Nación, por eso es un doble mérito para María Fernanda, porque es una gran luchadora.
-¿Cómo tomó esta noticia a los que militan en Diafar, la Diáspora Africana de la Argentina?
La noticia no nos sorprendió porque conocemos el trabajo y la trayectoria de María Fernanda Silva. Sabemos que este nombramiento es por demás merecido. Nos preocupó sí, la demora de su nominación, sobre todo la vinculación que tiene María Fernanda por haber sido la segunda a cargo en la Embajada Argentina ante el Vaticano hasta la llegada de Macri. Era un espacio más que ganado, así que imaginábamos o deseábamos que llegara antes este nombramiento y nos hubiera parecido injusto que no fuese ella la elegida. Pero enhorabuena su designación en este momento lo que significa un motivo de orgullo y festejo para toda la comunidad afroargentina.
Esta celebración no es sólo importante como reconocimiento a su trayectoria profesional, sino como decía antes, es trascendental también por su vinculación efectiva con la agenda de la comunidad afroargentina. No se trata que nombren gente negra en la función pública y cubrir, para la foto, una diversidad estética. Esto se relaciona principalmente con una diversidad de concepción, de ideas, de agendas. María Fernanda tiene un compromiso fuerte con esta agenda de demandas de nuestra comunidad. Está concentrada en los aspectos de la justicia reparativa, del resarcimiento histórico y de la memoria colectiva. Hay un compromiso verdadero en las ideas de la lucha antiracista en los términos en que se dan en los límites de la argentinidad. Entonces, está bien ocupar lugares con gente de todos los colores, de todos los sexos; pero esto no es lo que define la trayectoria de María Fernanda Silva. Por eso la comunidad y Diafar celebra esta designación en particular. Esta celebración se fundamenta en su compromiso para con el colectivo afroargentino y con su perspectiva ideológica y política en relación a la agenda de nuestra comunidad.