El teatro Gargantúa cierra sus puertas
“Lamentablemente, yo no soy la dueña del inmueble, sino que lo alquilo, y la propietaria ha tomado la decisión de vender. Hemos hecho todo lo posible para poder quedarnos, pero no hubo manera. El teatro se va a demoler para levantar un edificio. Incluso le ofrecimos seguir hasta que la operación de venta se cierre y se aprueben los planos, pero no prosperó la idea. La dueña está muy firme en su decisión: quiere vender para que se demuela y se construya una torre”, lamentó la actriz Alejandra Sierra y actual directora.
La sala ocupa 250 metros cuadrados aproximadamente y está habilitada para recibir hasta ochenta espectadores. Puede ser utilizada en formato de café-concert, con pequeñas mesas donde se puede tomar y comer algo durante las funciones, como con butacas tradicionales.
El Teatro Gargantúa fue inaugurado el 2 de Julio de 1999 por Ricardo Arauz y Nora Acrich, quienes buscaban transformar una casa antigua del barrio en un teatro propio.
El sábado pasado a la noche realizaron un brindis entre amigas, amigos y público de Gargantúa como despedida del espacio.
Historia
En el año 1945, el actual Teatro Gargantúa se llamaba » Bar Los Andes» y además de ser el lugar donde Julio Sosa inició su carrera artística, funcionaba como un famoso espacio de reunión para algunos tangueros de renombre como Jorge Vidal, Alberto Marino y el Tano Genaro, entre otros. Con el correr de los años, el «Bar Los Andes» pasó a la historia y aquella amada pulpería se transformó en una ferretería y taller mecánico para luego convertirse (gracias al proyecto de autopista que Cachatore iba a construir) en una propiedad expropiada y deshabitada. Fue en Julio de 1999 cuando, por el sueño del teatro propio, Ricardo Arauz y su equipo comenzó a transformar aquel galpón olvidado en un nuevo espacio de encuentro e intercambios entre artistas. Aquel viejo bar donde se juntaban múltiples tangueros – gracias a un gran trabajo en equipo – se transformó en el Teatro Gargantúa, un espacio que ofrecía delicias caseras en su bar, diferentes obras de teatro y múltiples cursos artísticos.