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El patrimonio arquitectónico porteño a la deriva


El 31 de diciembre vence la ley 2548 que protege los edificios anteriores a 1941.La prórroga de la mencionada norma aun no fue tratada y a Macri no le interesa. Mientras tanto, fue demolida la última casa donde vivió Alfonsina Storni.

 

 

 

 

 

La Asociación Basta de Demoler (B!D), emitió un comunicado titulado “Billetera mata patrimonio arquitectónico” Es que una ley de emergencia está siendo ¨demolida¨ para que se habilite la demolición real del patrimonio de la ciudad.

 

El informe señala que mediante la ley 2548, de los aproximadamente 140.000 edificios construidos antes de 1941, se han evaluado y puesto en un catalogo preventivo provisorio solo el 5%. Este modesto porcentaje parece que ha enfurecido a la corporación inmobiliaria que no ha escatimado medios para suprimir esta humilde protección que se venía prorrogando con batallas sucesivas desde hace cuatro años.

 

El comunicado de B!D resalta que “Ahora y bajo el paraguas del 64% de los votos, el ejecutivo de la ciudad ha ordenado a su tropa de legisladores que se oponga a la prorroga y parece también haber presionado a diputados ajenos para consumar la inevitable desaparición de nuestro patrimonio edilicio”.

 

Basta de Demoler, hace notar que dicho patrimonio edilicio es un recurso económico genuino, el único que tiene la ciudad, y que el mismo Gobierno porteño hipócritamente promociona en sus campañas de fomento turístico.

 

La denuncia apunta a que este recurso no va a ser reemplazado por un estudiado plan urbano, o por viviendas al alcance de todos, o por la revitalización de sectores olvidados. “Será reemplazado por la pura especulación, por el blanqueo de dinero, por la arquitectura falta de calidad que se levantará en las parcelas de más valor que son las que dan el rédito inmediato.”

 

El comunicado finaliza diciendo que “poco importa a los legisladores que la Constitución de la Ciudad y de la Nación digan que es deber del estado proteger el patrimonio, si ni siquiera importan los daños que las demoliciones irresponsables conllevan.Desde 2008 han ocurrido 23 derrumbes y ocho muertes, y 13 de ellos con cuatro muertos solo en 2011. Todos ellos evitables aplicando los controles pertinentes.”

 

La semana pasada la legisladora María José Lubertino presentó un proyecto que pide catalogar todos los edificios anteriores a 1941. “Sé que no todos tienen valor patrimonial, pero es una estrategia. Existe un fallo de Cámara que dice que mientras haya un proyecto que proponga la catalogación, no se puede tirar abajo un edificio hasta que la Legislatura se expida. Esto evitará las demoliciones en enero y febrero, hasta que vuelva a sesionar la Legislatura. El otro fin es lograr que el Ejecutivo haga un relevamiento de esos edificios para proteger a los que merecen catalogación”.

 

Por su parte, María del Carmen Arias Usandivaras, presidenta de la Asociación Basta de Demoler señaló que «De no existir esta ley, los grandes constructores y las inmobiliarias nos llenarán de edificios de metal y vidrio anodinos, que se pueden observar en cualquier ciudad del mundo, y Buenos Aires dejará de ser una ciudad diferente y turística. Se burlará la Constitución de la ciudad de Buenos Aires y los porteños perderemos el patrimonio que tenemos para legar a las generaciones futuras.»

 

 

Demolieron la última casa que habitó Alfonsina Storni

 

En Terrada 578, Barrio de Flores, entre las calles Dr. Juan F. Aranguren, y la Avenida Avellaneda (Fotografía: Mapa interactivo de la Ciudad de Buenos Aires, 1997), se demolió la semana pasada una de las viviendas donde habitara Alfonsina Storni. “La poetisa, nacida en Suiza, habría vivido en la ciudad de Buenos Aires en tres casas. Una en la calle José Bonifacio al 2000, otra en Cuba al 3200 y la última en Terrada 578″.

 


Foto: Basta de Demoler

 

 

Es precisamente esta última desde donde Alfonsina partió hacia Mar Del Plata donde el 25 de octubre de 1938, su cuerpo fue hallado en la playa. Si bien se trata de una humilde casa de barrio y de relativo valor arquitectónico, era indudable su importancia histórica y simbólica.

 

La casa se encontraba bajo el amparo de la Ley 3056 y 1227. Esta última “constituye el marco legal para la investigación, preservación, salvaguarda, protección, restauración, promoción, acrecentamiento y transmisión a las generaciones futuras del Patrimonio Cultural de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires”.

 

 

 

MÁS INFORMACIÓN: www.bastadedemoler.org

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Redacción

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