Denuncian como ilegal una demolición en el Cementerio de la Chacarita
Rechazan cualquier intervención sin previa consulta pública a los vecinos y a los integrantes de la Comuna y sin que se explique acabadamente la obra a realizar.
Por este tema, desde el Sindicato Obreros y Empleados de Cementerios de la República Argentina (SOECRA), denunciaron que hace unos días comenzaron distintas obras en el Cementerio de Chacarita. “Las mismas no cuentan con los carteles reglamentarios indicando el objeto, método de contratación, profesional a cargo, repartición que la encomienda. Tanto los contribuyentes como los trabajadores desconocemos los alcances de dichos trabajos. Es de gran preocupación que los mismos no atienden las necesidades más urgentes que presenta el cementerio. Ante la falta de información oficial, corren los trascendidos que señalan un plan para demoler el perímetro del cementerio para la construcción de plazas. Esto se da de cara a la realidad, las rejas no son efectivas para contener el vandalismo y los robos, al tiempo que dejan a la vista externa la operatoria mortuoria que por sus características, sumado al decoro y preservación de la intimidad de los deudos, deberían preservarse. En el perímetro a demoler se encuentran además construcciones históricas, como las galerías 1 a 9 que datan de la época de la fiebre amarilla. Se afecta la seguridad, el derecho al descanso de nuestros difuntos, el patrimonio urbano y además la estabilidad laboral de muchos trabajadores”, expresaron desde el gremio.
La comunera Camila Rodríguez, integrante de la Junta Comunal 15, informó que estuvo reunida con los trabajadores del Cementerio de Chacarita; organizaciones y vecinos del barrio homónimo; con el historiador barrial Hernan Vizzari y miembros de la ONG «Basta de Demoler», en una recorrida por la zona del Cementerio que el Gobierno porteño comenzó a demoler. “Las obras se están realizando en forma semiclandestina, sin informar ni a la Comuna 15 ni a las vecinos ni a las instituciones que siguen los temas patrimoniales. La obra (que incluyó la de demolición de zonas históricas) siquera posee cartel de obra y están avanzando sobre patrimonio histórico de la Ciudad de Buenos Aires”, publicó Rodríguez en su cuenta de facebook.
Desde el Gobierno de la Ciudad dijeron que esas construcciones que forman parte del Patrimonio histórico de la necrópolis, corren peligro derrumbe.
Hernán Santiago Vizzari, editor del Portal www.cementeriochacarita.com.ar, cuenta que el Cementerio tiene 97 hectáreas por lo que se lo considera uno de las más grandes del mundo. Tiene en su interior varias galerías de nichos construidas por la Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires entre 1900 y 1960, “cuando dar un servicio digno en los cementerios municipales era una prioridad. Hoy no parece ser tan así, y se busca borrar silenciosamente estos edificios de la muerte, que en su momento sirvieron para dar un digno lugar de descanso a miles de porteños. Si bien algunas están en estado de abandono, muchas de ellas aún albergan cuerpos y restos que actualmente son visitados por sus familias”, describe Hernán Vizzari.
Las galerías sobre la avenida Jorge Newbery son de los años 30. Su arquitectura es de líneas elegantes y sobrias, y su inauguración fue un evento de gran importancia para la sociedad porteña. Sobre Elcano hay una galería de nichos al aire libre y subterránea, de unos 100 metros de largo. Fue construida y utilizada en el esplendor del cementerio, ya que contenía en sus nichos restos desde 1895. Hace varios años dejó de funcionar, terminó profanada y vandalizada. Nunca fue mantenida, ni se le hicieron trabajos de remodelación, solo se la dejó en el abandono.
Vizzari, agrega además, que “el llamado Gran Panteón, que involucra a las galerías que van de la 15 a la 22, está en el centro del cementerio y es donde se encuentra la mayor parte de la problemática de abandono. Allí, curiosamente, se hace la mayor cantidad de inhumaciones y visitas de deudos. Se inauguró en 1958, con los primeros panteones subterráneos. Tiene unos 23.200 nichos para ataúdes, 3.900 para urnas grandes de restos y casi 13.000 nichos para urnas pequeñas. Los templetes de los accesos fueron diseñados por el prestigioso arquitecto Clorindo Testa y la constructora que participó en el trabajo fue Polledo Hnos. Es fácil diagnosticar que el estado crítico es simplemente por no poner atención ni destinar un presupuesto, ya que en su momento fue construido con elementos nobles y a conciencia. Pero sin el mantenimiento adecuado, nada es eterno… ni siquiera esta ciudad de los muertos”.