Cumple dos años un curso de Jardinería inclusiva
La Facultad de Agronomía de la UBA realiza un proyecto de extensión con la Escuela Nº 6 de la Ciudad de Buenos Aires, que promueve la inclusión social de jóvenes con capacidad intelectual diferente, a partir de actividades teórico prácticas en jardines. Además de aprender un oficio, se fomenta la integración y otros aspectos.
La cátedra de Jardinería de la Facultad de Agronomía de la UBA (FAUBA) lleva adelante un proyecto de extensión con jóvenes con capacidad intelectual diferente, junto a la Escuela Nº 6 de la Ciudad de Buenos Aires, con el objetivo de generar actividades teórico prácticas complementarias a los contenidos curriculares y ofrecer a los estudiantes la posibilidad de aprender un oficio y acceder a un empleo.
Las actividades se desarrollan desde hace dos años en la sede Devoto de la FAUBA, junto a los docentes de Jardinería Héctor Svartz y María Teresa Roccati, y de la escuela, Mónica Edit Pereyra y María Eugenia Guiraldes. Actualmente, está abierta la convocatoria para recibir a más voluntarios que quieran colaborar con el programa de extensión e integrar a nuevos alumnos a partir de pasantías laborales.
“Nuestra escuela cuenta con 170 alumnos que poseen una debilidad mental leve, provenientes de la Ciudad de Buenos Aires y del conurbano bonaerense. Vienen desde niños que van al jardín, hasta jóvenes de entre 15 y 30 años que ingresan por la tarde a la institución para aprender un oficio”, explicó Pereyra, psicopedagoga y responsable del proyecto desde el colegio.
“La propuesta es generar espacios de trabajo. Por eso nos contactamos con la Facultad de Agronomía de la UBA, con la intención de formar a nuestros alumnos en oficios relacionados con la jardinería y el ambiente”, agregó. Además, señaló que la escuela también recibe la colaboración del programa Aprender Trabajando, del Gobierno porteño, a través de la cual se ofrecen prácticas educativo – laborales a alumnos mayores de 16 años en situación regular de estudio.
Roccati, quien además de docente de Jardinería de la FAUBA es profesora de educación especial, destacó el trabajo que se viene llevando adelante: “Es maravilloso trabajar con los chicos y estar en contacto con la tierra”. Al respecto, explicó que el espacio que les brinda la facultad, les permite poner en práctica la teoría y formar a los alumnos en aspectos que van mucho más allá de la jardinería.
“Las actividades que desarrollamos son terapéuticas para todos, incluso para los docentes. A los chicos no sólo les permite aprender contenidos vinculados con las plantas, los jardines y el cuidado del medio ambiente, sino también socializar, integrarse y consolidarse como grupo”, señaló Roccati.
“Pensamos a estos chicos en relación a la inclusión social, por eso sería muy interesante que puedan conseguir un trabajo, además de aprender en la escuela”, dijo Pereyra, y agregó que actualmente los estudiantes reciben un aporte simbólico por las actividades que desempeñan como trabajadores.
La psicopedagoga consideró que las prácticas de jardinería podrían permitir que los jóvenes trabajen en jardines del barrio, donde hay casas con parques, acompañados por un tutor, y repitan la experiencia de otros de sus compañeros que ya realizaron pasantías laborales en diferentes instituciones públicas y privadas.
Fuente: Gente BA